Sistemas contra Incendios
Los sistemas de alarmas contra incendios está formado por varios dispositivos electrónicos que funcionan conjuntamente para detectar y notificar un incendio u otra emergencia. A lo largo de los años, los sistemas de alarmas contra incendios se han vuelto cada vez más sofisticados, por lo que hemos elaborado una guía para ayudarle a comprender todos los componentes de un Sistema de detección y Alarma Contra Incendios y a sacar el máximo provecho de esta tecnología esencial.
Los sistemas de alarma han evolucionado considerablemente desde que Francis Robbins Upton, un asociado de Thomas Edison, patentó el primer sistema de alarma automático en 1890. Doce años más tarde, en Inglaterra, George Andrew Darby desarrolló los primeros sistemas de detección de calor y humo, y en 1965 aparecieron por primera vez las alarmas de humo alimentadas por pilas. Desde la década de 1980, los códigos de construcción exigen la instalación y el uso de detectores de humo a pilas.
El objetivo principal de un sistema de alarma contra incendios es detectar incendios y notificar rápidamente tanto a los ocupantes del edificio como a los servicios de emergencia desde un lugar controlado y supervisado centralmente. Estos sistemas también se supervisan a sí mismos, identificando la ubicación y el origen de las alarmas y detectando problemas con las conexiones y el cableado que puedan impedir que el sistema funcione correctamente. Esencialmente, los sistemas de detección de incendios tienen cuatro funciones principales.
Estos sistemas altamente avanzados utilizan una red de aparatos, dispositivos y paneles de control para realizar estas cuatro funciones. Para ayudarle a comprender mejor el funcionamiento de un sistema de alarma, a continuación le explicaremos en detalle cada uno de sus componentes.
Un sistema de alarma contra incendios consta de muchos componentes, entre ellos
A continuación vamos a explicar qué hace cada componente.
El panel de control de alarma de incendio, comúnmente abreviado como FACU, es el “cerebro” del sistema. Recibe los mensajes de los dispositivos de iniciación, también conocidos como entradas, y realiza las siguientes funciones
Activación de las notificaciones: Al recibir las señales de las entradas, la FACU enciende los dispositivos de notificación necesarios, también conocidos como salidas. Alerta a las personas que se encuentran en las inmediaciones de que se ha producido un problema.
Recuperación de ascensores: La FACU también recupera los ascensores, lo que elimina la posibilidad de que un ascensor lleve a las personas a una zona llena de llamas o humo.
Apagado del sistema de climatización: Si detectan humo en un conducto de aire, muchos sistemas de alarmas contra incendios apagan la unidad de tratamiento de aire, evitando así que el humo se propague a otras partes del edificio.
Notificación a la central de alarmas: La FACU también alertará a una central de control de alarmas remota, que, a su vez, notificará a los servicios de emergencia.
Un sistema de alarma contra incendios mal diseñado o instalado que no reciba mantenimiento, pruebas e inspecciones rutinarias probablemente se activará incluso cuando no haya un peligro real. Las falsas alarmas frecuentes harán que la gente las tome menos en serio. Cuando oyen una alarma de incendio, muchas personas asumen que no es motivo de preocupación a menos que también huelan humo o vean llamas.
Para minimizar la incidencia de las falsas alarmas, el sector de las alarmas contra incendios ha impulsado el diseño, la instalación, las pruebas, el mantenimiento y la inspección adecuados del sistema.
Los tipos de sistemas de alarmas contra incendios incluyen los direccionables y los no direccionables.
Direccionable: Los paneles direccionables controlan todos los componentes de la alarma de forma individual. Cada dispositivo tiene una dirección distinta y separada, lo que permite al panel conocer su estado, por ejemplo, si funciona normalmente, si está en alarma o si tiene problemas. Por ejemplo, los sistemas direccionables permiten a quienes trabajan en la recepción de un hotel conocer la ubicación exacta del evento con sólo mirar la pantalla del panel de alarma.
No direccionable: Este tipo de sistema coloca todos los dispositivos de iniciación en zonas, lo que significa que los usuarios tienen que comprobar físicamente cada dispositivo de esa zona para encontrar el que está en alarma. Por ejemplo, si tiene un sistema no direccionable y la alarma se dispara, le diría algo como “Zona de alarma 3, cuarto piso”.
La mayoría de los propietarios y administradores prefieren los sistemas direccionables, ya que permiten conocer la ubicación específica de la alarma y evaluar la situación mucho más rápidamente. Algunos paneles de alarma contra incendios también pueden notificar a las estaciones de control de alarmas remotas, que pueden ponerse en contacto con los servicios de emergencia. La mayoría de las leyes estatales no permiten que los paneles contacten directamente con los servicios de bomberos.
Los paneles de alarma contra incendios supervisan e indican continuamente el estado del sistema de alarma contra incendios. Para la mayoría de los sistemas, hay tres estados posibles.
Los dispositivos de iniciación inician las alarmas y, al igual que los paneles de alarma, pueden ser direccionables o no direccionables. Algunos dispositivos de iniciación, como los interruptores de flujo de agua, son tradicionalmente no direccionables, pero se conectan con módulos direccionables. Los interruptores pueden tener direcciones específicas que les permiten comunicarse con sistemas direccionables.
Hay muchos tipos de dispositivos de iniciación. Además de los interruptores de flujo de agua, los dispositivos de iniciación también pueden ser
Una estación de tiro es probablemente el componente del sistema de alarma contra incendios con el que está más familiarizado. Es un dispositivo de accionamiento manual que inicia una señal de alarma cuando alguien tira de su manivela. Mientras que el humo puede tardar unos minutos en llegar a un detector de humo, puede activar una estación de tiro en tan sólo unos segundos de un incendio u otra emergencia, lo que permite una evacuación más rápida y tiempos de reacción más rápidos por parte de los bomberos. Las estaciones de tiro están disponibles en varios tamaños y formas y pueden venir con cubiertas protectoras si se solicita.
Un detector de humo es un dispositivo que inicia una señal de alarma cuando detecta humo. Existen dos clasificaciones de estos dispositivos, según el tipo de sensor que utilizan para detectar las partículas de humo.
Los detectores de conductos son detectores de humo instalados en los conductos de aire acondicionado y calefacción. Apagan las unidades de tratamiento de aire, evitando que el humo se desplace por todo el edificio a través de los conductos de aire.
Los detectores de calor son dispositivos de detección de incendios equipados con sensores que responden al calor. Existen dos tipos principales de detectores de calor.
Este tipo de detector de humo proyecta un haz de luz a través de la zona que protege. Si el humo cruza la trayectoria del haz, el detector responderá.
Este tipo de detector utiliza tubos para hacer llegar el aire o el humo a un detector central equipado con un sensor que puede detectar cambios mínimos en la composición química del aire. Estos detectores suelen ser muy sensibles.
Los interruptores de flujo de agua utilizan paletas situadas dentro de las tuberías llenas de agua que responderán si fluye el agua. En los sistemas de rociadores, su diseño les permite funcionar si el agua fluye desde un solo rociador.
Un interruptor de manipulación es un dispositivo de iniciación de supervisión que funciona si alguien mueve la válvula de su posición habitual.
Estos dispositivos envían una notificación visual o sonora para alertar a los ocupantes de un edificio para que lo evacuen.
Los dispositivos audibles incluyen sirenas, campanas y bocinas.
Los estroboscopios envían notificaciones mediante el parpadeo de una luz.
Estos dispositivos envían notificaciones mediante el parpadeo de una luz y el sonido de una sirena para alertar a las personas para que respondan.
Algunos sistemas de alarma de incendios tienen marcadores internos o externos que se utilizan para contactar con los centros de supervisión o las centrales receptoras de alarmas. Los comunicadores pueden utilizar señales de radio, líneas telefónicas o una conexión a Internet para mantener el contacto. Los paneles pueden tener marcadores o comunicadores integrados.
Los sistemas actuales requieren muchos dispositivos de notificación, que necesitan fuentes de alimentación adicionales, conocidas como fuentes de alimentación de notificación, o fuentes de alimentación NAC. Puede encontrarlas junto al panel principal o distribuidas por el edificio según sea necesario.
A veces, los códigos de construcción exigen la integración entre los sistemas de alarmas contra incendios y otras tecnologías. Sin embargo, en otros casos, la integración es opcional y voluntaria, como la integración con sistemas de iluminación, sistemas de climatización, cerraduras de puertas y sistemas de seguridad. Mientras que estos sistemas han necesitado históricamente comunicaciones de red independientes, ahora pueden operar en una infraestructura compartida, ahorrando dinero y agilizando los procesos.
Algunos ejemplos de funciones y sistemas comúnmente interconectados con los sistemas de alarmas contra incendios son:
Según el Código Nacional de Alarma y Señalización de Incendios, algunas de las anteriores son “funciones de seguridad contra incendios” destinadas a mejorar la seguridad vital de los ocupantes o a controlar la propagación del fuego. Se puede optar por integrar otras funciones o sistemas por diversas razones, como por sus ventajas operativas, el intercambio de información y el ahorro de costes.
Puede conocer los requisitos para inspeccionar, probar y mantener los sistemas de alarma de incendios, incluidos sus aparatos de notificación y dispositivos de iniciación, en el capítulo 14 de la NFPA 72 ‘Código Nacional de Alarma y Señalización de Incendios’. Sin embargo, a continuación resumiremos estos requisitos.
Debe hacer inspeccionar visualmente los componentes de su alarma contra incendios cada semana, cada mes, cada seis meses o una vez al año, según el calendario de la NFPA 72 en la tabla 14.3.1. Sin embargo, estos calendarios pueden variar dependiendo de las leyes locales, así como de la autoridad que tenga jurisdicción. Las inspecciones visuales estándar incluyen lo siguiente
Equipo de control: Compruebe esto cada semana para confirmar que el sistema funciona correctamente. Esto incluye la inspección de los LEDs, la fuente de alimentación, los fusibles y ver si hay alguna señal de problema.
Baterías: Dependiendo del tipo de baterías que tenga, debe comprobarlas una o dos veces al mes para ver si hay fugas o corrosión.
Detectores de calor, detectores de conductos y detectores de humo: Revíselos semestralmente.
Debe inspeccionar todos los equipos anualmente para confirmar que no hay cambios que afecten a su funcionamiento.
Las pruebas de los componentes implican más pasos que las inspecciones visuales, pero no es necesario hacerlas con tanta frecuencia. Aunque varios componentes requieren pruebas semestrales, la mayoría de los componentes sólo necesitan pruebas una vez al año, según la tabla 14.4.3.2 de la NFPA 72. Al igual que con las inspecciones, el calendario de pruebas puede variar en función de las leyes locales y de la autoridad que tenga jurisdicción. Estos son algunos ejemplos de pruebas de componentes.
Debe mantener los componentes de su sistema de alarma contra incendios de acuerdo con las instrucciones publicadas por su fabricante. La frecuencia del mantenimiento depende de las condiciones ambientales, así como del tipo de equipo que tenga. La forma de limpiar los componentes del sistema depende de su ubicación y de las directrices del fabricante.
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