Sistemas contra Incendios
Si alguna vez ha asistido a un concierto de rock, ha pasado junto a un martillo neumático en una obra o ha oído el estampido sónico de un avión de combate, sabrá que la exposición a sonidos fuertes puede dañar físicamente sus oídos. Muchas personas evitan los ambientes ruidosos porque el ruido excesivo puede provocar problemas auditivos en el futuro.
Esto nos lleva a preguntarnos por qué las alarmas de incendio son tan ruidosas. ¿Hay algo que pueda hacer para proteger sus oídos del ruido?
La norma NFPA 72 establece los requisitos para los dispositivos de notificación de alarmas de incendio, que adoptan dos formas principales: audibles y visibles.
No cabe duda de que la exposición prolongada y repetida a ruidos fuertes puede dañar la audición. El Instituto Nacional de la Sordera y Otros Trastornos de la Comunicación (NIDCD) afirma que 85 dB y más es la zona de peligro de pérdida auditiva.
Aquí tienes algunos ejemplos comparativos de ruidos que te ayudarán a entender la intensidad de los distintos decibelios:
Obviamente, el objetivo de una alarma de incendio es asegurarse de que todos en el edificio sepan que deben evacuar. Por eso la NFPA exige que las sirenas y bocinas de alarma de incendio suenen más fuerte que los ruidos ambientales.
El requisito preciso es de 15 dB por encima del nivel medio de ruido o de 5 dB por encima del sonido ambiente máximo, el que sea mayor. Esto significa que puede ser adecuado programar las bocinas de alarma de incendios a 75 dB para un restaurante o una oficina, pero una instalación industrial con equipos ruidosos puede necesitar un sonido más cercano al nivel máximo de 120 dB para garantizar que el sonido destaque sobre otros ruidos ambientales.
El requisito de volumen alto para las alarmas contra incendios tiene en cuenta el hecho de que la distancia desde la bocina disminuye su volumen percibido, y los materiales de construcción absorben el ruido, especialmente si las puertas están cerradas entre las habitaciones. Debido a estos factores, el nivel de decibelios debe ser alto en la fuente para garantizar que el sonido llegue a todos los rincones del edificio.
Cuando oye el ruido estridente de una alarma de incendio, su primer instinto es taparse los oídos. En realidad, es una forma eficaz de defenderse de la pérdida de audición mientras camina tranquilamente hacia la salida y se abre paso fuera del edificio.
Sin embargo, lo más importante es crear un plan de evacuación en caso de incendio y realizar simulacros con regularidad. De este modo, su personal sabrá con seguridad qué pasos dar y por dónde evacuar en caso de emergencia. Al planificar con antelación, puede limitar la confusión y reducir el tiempo de exposición a volúmenes altos.
Por último, si cree que el nivel de decibelios de su alarma contra incendios es demasiado alto, contrate a una empresa de protección contra incendios para que examine su equipo y tome una determinación. El técnico se asegurará de que el volumen es el adecuado para la seguridad y el cumplimiento de la norma NFPA 72.
Aunque las alarmas contra incendios pueden ser ruidosas, es imprescindible no manipularlas. La NFPA ha establecido códigos contra incendios que proporcionan la máxima seguridad para los edificios de todos los sectores. Desconectar o ajustar el volumen de sus sirenas de alarma contra incendios podría dar lugar a sanciones por incumplimiento y a una mayor responsabilidad. No olvide que en Qymsac somos especialistas en sistemas contra incendios en Perú, a su servicio.
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